Si alguien la vuelve a ver, dígale que nunca dejé de escribirle, aunque mi alma se haya quedado sin tinta.

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lunes, 23 de septiembre de 2019

SAETA SOLEANA.

¿A dónde miras?
¿A dónde miras Madre mía?
¿Buscas a tu niño Jesús?
Que murió ayer de día,
que murió ayer de día;
Nos dejó a oscuras de luz...
¿Tanto te duele María?

Sanlúcar llora tu pena
y lo siente de verdad
aunque tu nombre sea Sola...
¡No estás sola Soledad!




sábado, 21 de septiembre de 2019

ANGUSTIAS CORONADA.

Señora de buen agüero,
mi Angustias venerada,
rosa dulce perfumada,
con aromas de barrio nuevo.

En tu refugio alfarero
mi alma fue afortunada,
mis penas atenuadas
y me sentí pinturero.

Reina de un poblado obrero,
al que fuiste destinada
no te sentirás apenada
entre murallas y barreros.

Aromada con romero
y con dalias perturbadas,
con jazmines caseros
y en terciopelo acunada.
Patrona de mil mochuelos:
María, tú, afortunada,
amor de tus costaleros,
María, tú, abanderada
de mi barrio de San Pedro.
Eres Reina soberana,
eres dadora de consuelo,
eres una bella gitana,
eres guía del nazareno,
amor de hermanos y hermanas;
y este año por fin espero
que seas Angustias coronada.


Foto extraída de Pasión y Esperanza.



domingo, 15 de septiembre de 2019

AQUÍ ESTOY, YO SOY.

¡Aquí estoy, Yo soy!
¿Quién eres Tú Madre mía?
Que mis ojos no dan “pa “más;
¿Eres Encarnación la del Huerto,
o la Virgen de la Paz?;
¿Eres Rosario, o la del Carmen?,
¿Auxiliadora, de los Dolores?
¿Eres Concepción, o eres Piedad?;
¿Eres la Reina de los Ángeles,
o mi Madre de la Soledad?

Yo soy todas, Yo soy Una,
soy la que viniste a exaltar,
esa de los ojos grandes,
esa de dulce mirar,
soy la Reina de los Cielos
la que te inspiró a rimar.
Yo soy la Madre alfarera
la que vive “amurallá”
parí al que dormía en la urna
la que apacigua tu ansiedad.
Yo soy aquella que solloza
cuando lo van a crucificar,
Angustias siento por mis hijos
que no tienen lealtad;
tengo Angustias de este mundo
que maneja la maldad,
tengo Angustias de esta tierra
sin amor y sin verdad.

Tengo Angustias del maltrato,
de quien viola con crueldad,
tengo Angustias de esa hambre
que nos lacra sin piedad;
Tengo Angustia, tengo Angustia,
tengo “Jóse” gran Angustia,
por tan poca caridad.

- ¿Jóse?, ¿Jóse?
Soy Yo Jóse, y he venido a por ti.
¡Señora mía, ya me ahogo
 no puedo más resistir!
-No te preocupes hijo mío
ya tu misión se cumplió,
es hora de cerrar las pastas
concluyendo la exaltación.
-Perdona Madre si me quedé corto,
perdona si no fui más capaz,
perdona si algo se me escapa,
no sé qué más puedo decir ya…
sólo besar de nuevo mi medalla
y despedirme con un piropo
que me sale de dentro del alma:
¡Mi Virgen de las Angustias:
guapa, guapa, guapa, y otra vez: GUAPA!

 De mi exaltación a la Virgen de las Angustias 2019.

Foto extraída de la página: cinturondeesparto.com









GUARDÁNDOME LAS ESPALDAS.

Lloroso Sábado Santo
nubarrones negros de cielo,
aguardaba triste en el suelo
si seguía o volvía al templo.

Lloroso Sábado Santo
atribulado, sin consuelo,
con mi hábito de nazareno
y a mis espaldas, tu manto.

Miro atrás, me vas serenando,
cera llorada, negro tu palio,
mirada dulce que obra el milagro
mañana ya vendré, pues ahora me marcho.

Arropaste Madre mía, mi tristeza
en el frío escalón del suelo,
con tu amorosa entereza
hasta que partió el cortejo.

Sentí tu amor que me guardaba la espalda,
ese calor, esa luz de caridad,
me despedí de tu espadaña
y regresé con mi Soledad. 

Tras cuarenta años, o más,
de nuevo tu amor a mi espalda
pues me volviste a abrazar,
después de un duro fin de semana
en el que no cesé de rezar;
me acogiste en tu regazo
ese que tan bien recrea Juan
y allá muchos nos juntamos
“pa” podernos retratar;
todos éramos del Sanedrín
que en San Pedro nos reunimos
para escuchar y para juzgar
dando gracias a Dios Padre,
rezando: ¡Elohím Kushá!




De mi exaltación a la Virgen de la Angustias 2019.





LA SOLEDAD Y LA BULLA.

Miro abajo, la calle se hace oscura
nazarenos pocos, mas con verdad,
mi alma se impregna de soledad
en una recogida que se augura.

Noche húmeda se asegura
madrugada triste en mi ciudad
no se atisba la claridad
que proclama tu hermosura.

En sus caras, siempre dulzura,
calle abajo, ese es su afán
pues se sospecha el desmán
que más arriba es tu guapura.

Tu hijo jamás lo censura…
¡Es tan difícil eso de amar!
Que cuando doblas la cintura
de Marín Feria, en tu altar,
se desborda la locura,
empezando a “cangrejear”
 lo más profundo de la bulla. 

Un sinfín de criaturas
que se afanan por mirar,
y ese veneno sin cura
que es tu manera de andar.
Costaleros sin fisuras
a la voz del capataz,
candeleros que fulguran
con silencio y claridad
dando luz a tu figura.
Ya todo es luminosidad,
el incienso me acalora,
 ¡Al cielo “tos” por igual!
¡Angustias, Reina, qué locura!
Aquí todos te procuran

y más abajo, soledad.

De mi exaltación a la Virgen de las Angustias 2019.






PALABRAS Y SONES AL VIENTO.

Los cernícalos de las murallas
escuchan un eco, muy atentos
desde la Plaza de San Pedro
cuando la música estalla.

En un suspiro compases que callan
y mana del balcón un lamento
saetas plenas de sentimiento
que en tu parihuela se entallan.

Rumores roncos por la muralla
de un capataz satisfecho,
no ha lugar a desfallecimientos
de esos costaleros con agallas.

Y un micrófono que sonsaca
de entre el murmullo del viento,
el rumor que en el aire escapa
que es un gentío dando aliento;
un sudor que a mí me empapa
y lo digo cual lo siento:
¡Angustias gitana! te aclama
de mi alma el acento;
y una voz que al firmamento
de debajo del paso destaca
impregnada de sentimiento;
es mi Cuca el que declama
y vocea a los cuatro vientos:
¡Angustias!, ¡Gitana!, ¡Morena!, ¡Guapa!
Y tus costaleros, dándose aliento
pareciera que los faldones destapan
contestando con unísono sentimiento:
¡Guapa, guapa, guapa y guapa!





De mi exaltación a la Virgen de las Angustias 2019.










LA MURALLA Y LA PIEDRA.

De piedras color canela
con jaras verde romero,
nido y calor en invierno
para un “puñao” de mochuelos.

Raída en más de mil años
hoy renace pequeñita
dándole cobijo al alma
de una antigua Mezquita.

Leo en su cara la historia
aunque esté siglos dormida.
En tiempos no tan lejanos
disfrutaba de propia vida.

Era estandarte y fortaleza,
era corona de la colina;
arropaba a un minarete
que de Sanlúcar es el vigía.

Paredes nacen en su cara,
piedras posadas en el suelo,
donde la Redención fue clavada,
quizá fuera mi bisabuelo
quien lo enterrara de nuevo,
y su Madre de las Angustias
lloraba ese mismo duelo,
consolada por la muralla cristiana

de mi Barrio de San Pedro.




De mi exaltación a la Virgen de las Angustias 2019.

GESTANDO UNA ORACIÓN.

Casa blanca entre murallas
con estufa “pa” arropar;
papeles y más papeles
para intentar expresar,
lo que tu corazón sentía
por tu Angustias natal.

Noches y más noches
muchos días sin reposar,
latidos de una memoria
que no querías olvidar.

Lecturas y más lecturas
hasta tu voz apagar
aromas que emanó tu alma
a la hora de pregonar.

El corazón en la boca,
dificultad “pa” respirar,
mas el trabajo te premia
y ya lo puedes declamar.
¡Es tu hora mi buen Manuel!
¡Es la hora de tu verdad!
Ya estás en posición
 a tu Virgen vas a rezar,
Sanlúcar poco ha de esperar
para escuchar tu oración.

¡Abre ya tu alma de luto!
¡Abre tus sentimientos de pasión!
¡Abre tu vida a las Angustias
que aquí estará esperando
cuando termines el pregón!




De mi exaltación a la Virgen de las Angustias 2019.
















MÚSICA Y MADERA.

Solo suenan doce notas tocadas
melodías que vuelan al viento
esas, que alivian tu sufrimiento
con octavas intercambiadas.

Bandas, las bandas suenan todas
mas vosotros desde el nacimiento
impregnáis un dulce sentimiento
que a las demás siempre desborda.

Con cornetas y tambores, o solo caja
se marca un compás de adviento
desde la calle La estoy ya viendo
ahí viene mi Angustias guapa.

Primero la fúnebre saludaba
al que iba en su lecho muerto,
y la guardia lo acompañaba
desde que tengo conocimiento.
Sale enseguida la cera blanca
aunque con antifaces negros
y cuando mi Reina se levanta
música de "racheo" siento.
Te acercas despacio a la entrada,
todos los músicos ya atentos
Antonio Ignacio la descifrara
la más dulce de los tiempos;
lloran instrumentos de viento
lloran hermanos y hermanas,
llora la música con tu acento

lloras Tú: ¡Angustias gitana!

De mi exaltación a la Virgen de las Angustias 2019




VECINO ALFARERO.

Partiste joven, rápido, temprano
hacia azules tejares de celosía,
tras padecer tu propia agonía
fuiste al cielo alfarero y gitano.

Ella no quiso vestirte de anciano
 adelantando pronto tu travesía,
y tú, con esa cotidiana cortesía
le cediste sin dudarlo la mano.

No pensaste en lo abandonado,
ni a quien tu despedida dolía;
tu Angustias te miró aquel día
y la seguiste como buen cristiano.

Tu hábito ya no es negro sevillano,
ahora es celeste de fantasía
y seguro que hablando no divago
porque es lo que mi alma ansía:
Le digo a mi querido “hermano”
esta corta, humilde y dulce poesía
“pa” mi vecino, ese, el escribano…
Esta sólo es, y será para tu padre
mi querido amigo Bejarano. 
  


De mi exaltación a la Virgen de las Angustias 2019.

EXALTACIÓN ANGUSTIAS ANTIGUA.

Quiero pensar que muy atrás
alguien hubiera como yo
que pudiera hacer tu exaltación,
por derecho, y de verdad.

Si no hubo en realidad
en aquel tiempo esta oración,
hoy quiero mostrar mi fervor
a tu cara de bondad.

Mejillas rosadas sin cuidar
y ropajes sin bendición,
mil cultos en elisión
escondida cautividad.

Angustias Madre, Angustias vieja,
Angustias de mi ansiedad,
Angustias fuiste devoción
de unos fieles de verdad,
Angustias de papel cartón
que me llegaste a asustar,
no eras morena, ni con buen color
ni eras gitana, ni cara de dolor,
no quiero en mi alabanza olvidar
de rezarte esta oración:

Dios te salve Angustias mía,
Angustias de antigüedad:
Llena de gracia Tú eres,
bendita generosidad,
porque cediste tu trono alfarero
a la Reina de actualidad;
Angustias Madre, te llegué a conocer
y en mi alma permanecerás
en la esquina en que te encontré
por los siglos de los siglos…
 ¡Amén!




De mi exaltación a la Virgen de las Angustias 2019.



CONVERSACIÓN MADRE E HIJO DORMIDO.

¿Qué son esas voces que suenan?
¡Van a despertar a mi Hijo!
Que yace en su cruz ya dormido
y eso su descanso refrena.

¿Qué son esas almas que penan,
que esta noche he advertido?
¿Y esos espantosos chirridos,
que en mis oídos resuenan?

¿Qué es ese martillo que truena?
¿Qué es ese oscuro crujido,
y ese rumor desabrido
que hasta el aire me envenena?

Madre:
Soy Yo, tu hijo amado,
ese rumor que me desvela
es de un amor desbordado,
es de almas que faenan
de rodillas y esforzados
y hasta los zancos cercenan.
No sientas Angustia a su lado
que me portarán sin penas;
y muchos de los de ahí abajo,
si la juventud no los frena,
más tarde o más temprano
serán tus pies, tus almenas,
serás su amor de cristiano
serás su Angustias morena.




De mi exaltación a la Virgen de las Angustias 2019.




DESDE EL "SOBERAO".

“Soberao” oscuro que yo recuerde
tan pequeño, casi sin luz,
se apagaba del cielo el azul
y se abrían puertas de muerte.

No encontré su cuerpo inerte,
tampoco hallé su Santa Cruz
ni tu dulce cara al trasluz
un negro palio me impedía verte.

Esa noche no pude quererte
sólo intuí nubes de humo,
de mi madre sus arrullos
y bambalinas “pa” esconderte.

Angustias, quise entonces atraerte,
escuchar el racheo de tus pasos;
pero tras la oscura madera verde
sólo pude divisar el manto
que te ponen “pa” embellecerte.
Angustias, incienso de humo blanco
mas yo solo podía olerte;
entonces rompí en un llanto
al no alcanzar a conocerte
en mi primer Viernes Santo.








De mi exaltación a la Virgen de las Angustias 2019.


sábado, 14 de septiembre de 2019

OH, MI REINA DEL VIERNES SANTO.

Déjame Angustias hermosa y morena
que sea otra vez pañuelo para tu llanto,
eres una Madre tan buena
y hace tanto tiempo, tanto,
que no te canto en un poema
que no ensalzo tu encanto,
que he querido hoy hacerlo
para aliviar tu quebranto.

¡Oh dorada y dulce patena!,
¡Oh Señora, para Ti, mi canto!,
¡Oh dolorosa de gracia plena!,
¡Oh portadora de encanto!,
¡Oh capitana de la cantera!,
La de ese luminoso llanto!

La que mi pena enajena,
La que me libra de espantos,
vecina de la Magdalena,
y Soberana de tu barrio sacrosanto.
Mírame con tus ojos, serena,
y arrópame Señora con tu manto,
tu mecida me envenena…
¿Cuánto tiempo hace, cuánto,
que tu amor entró por mis venas?
¡Eres la dulzura callando!,
¡Eres mi Princesa alfarera
que tiene “to” el arte andando!,
¡Ruega por nosotros, Virgen Morena!,
¡Mi Reina del Viernes Santo!

De mi exaltación a la Virgen de las Angustias de 2019.


Foto de mi amigo/hermano José Antonio Bejarano en la página de facebook de la Hermandad.